(https://autisticandcheerful.wordpress.com/2018/04/06/why-aba-is-a-bad-idea. Traducción de Pilar Ramírez Tello)
El análisis conductual aplicado (Applied Behavioural Analysis o ABA) es la estrella dentro de los «tratamientos» para el autismo en los Estados Unidos y, cada vez más, en el Reino Unido*. Una y otra vez se ha anunciado como la solución que te cambia la vida; ¡funciona de verdad!
Bueno, no negaré que «funciona» en el sentido de que alcanza el efecto buscado. Pero el hecho de que logre sus objetivos no significa que deba usarse.
En primer lugar, ¿qué es el ABA? Se trata de una técnica de modificación de la conducta que se desarrolló entre los años cincuenta y sesenta del siglo pasado. Se basa en recompensar el comportamiento deseado y castigar el «mal» comportamiento. Ivar Lovaas fue uno de los pioneros y una gran influencia en el desarrollo de este tipo de terapia. En los primeros tiempos se usaban estímulos aversivos como las descargas eléctricas para evitar el comportamiento no deseado. Ahora, sobre todo (aunque no siempre), se ven alegres colores primarios y profesionales sonrientes. ¡Hasta suena divertido! Cuando aparece el comportamiento no deseado, los castigos varían desde no prestar atención a la conducta a chillar al niño, pasando por quitarle privilegios. Según nos cuentan los padres, a los niños autistas les «encanta» esta nueva versión del ABA. (Si queréis saber más sobre esta terapia y su historia, os recomiendo leer Neurotribes, de Steve Silberman).
Entonces, ¿por qué no me gusta?
No entraré en detalles sobre si los profesionales de esta terapia todavía enseñan el «manos quietas» u obligan a establecer contacto visual; ni tampoco sobre si dedican cuarenta horas semanales a la terapia o solo diez. El ABA puede ser tan ético como uno quiera, pero, aun así, sigo sin pensar que sea una buena idea.
Si le preguntas a alguien qué cualidades desea ver en su hijo cuando crezca es probable que responda que inteligencia, amabilidad, diligencia, empatía, flexibilidad, que sepa resolver problemas, o algo por el estilo. Lo que seguramente no oirás responder a nadie es «obediencia». ¿Por qué se valora la obediencia en los niños pero no en los adultos? En general, por comodidad. Está claro que explicarles las mismas cosas a los niños una y otra vez es una mierda. Tengo hijos, así que lo sé muy bien. Sin embargo, ¿qué sentido tiene pasarse un siglo enseñándoles a tus hijos a ser obedientes y después esperar que eso no les suponga un problema importante al llegar a la edad adulta?
Planteémonos estas preguntas:
¿Qué les está enseñando el ABA a los niños sobre su seguridad personal?
¿Es buena idea enseñar a alguien que pertenece a un colectivo ya de por sí vulnerable que lo mejor es ir en contra de su comportamiento y sus instintos naturales para hacer lo que otra persona quiere que haga?
Al recompensarlos por seguir las instrucciones sin cuestionarlas, incluso cuando van en contra de sus instintos o les hacen daño, se está creando a una persona condicionada para agradar a los demás; ¿es lo mejor para alguien vulnerable?
¿Crees que así les estás proporcionando las habilidades sociales necesarias para poder decir que no cuando procede o incluso para saber cuándo está permitido decir que no?
¿Qué les enseña el ABA a los niños autistas sobre el consentimiento?
Ya he hablado en alguna ocasión sobre lo vulnerables que son las personas autistas ante los abusadores (https://autisticandcheerful.wordpress.com/2017/11/20/autistic-people-are-vulnerable-to-abuse/). Y lo único que veo es que esta terapia agrava el problema, ya que tienes a un grupo de personas a la que les cuesta distinguir si alguien se les acerca con buenas o malas intenciones, y la terapia procede a condicionarlas para decir que sí incluso cuando lo que aceptan va en contra de sus deseos.
Si tienes hijos autistas que están recibiendo ABA no voy a afirmar que estés abusando de ellos ni nada parecido. Sé que quieres a tus hijos y que deseas ayudarlos. A muchos padres les dicen que deben apuntar a los niños a esta terapia lo antes posible porque, si no, las consecuencias serán funestas. Les dicen que la ventana de oportunidad es pequeña.
Lo cierto es que la elección no se reduce a «o ABA o nada»; hay multitud de formas de criar y ayudar a los niños autistas sin necesidad de recurrir al ABA. Recomiendo echar un vistazo a Parenting Autistic Children With Love and Acceptance (https://autloveaccept.wordpress.com/) o Better Ways Than ABA (https://www.facebook.com/Better-Ways-Than-ABA-1853865171523852/) para saber más sobre la crianza positiva en el autismo. Si tu seguro solo cubre el ABA, únete a otros padres y pedid que os ofrezcan otra cosa.
Luchar por los derechos y el futuro de tu hijo autista es algo que todos podemos y debemos hacer juntos. Construyamos un mundo mejor para la próxima generación de personas autistas.
*Nota de la traductora: Y también es una terapia muy popular en España.
